Lejos queda ya aquella joven pianista que cautivó a público, medios especializados e incluso maestros como Oneohtrix Point Never en 2017 con Bloodroot, su primer LP y un álbum que la llevó a ser la pianista en los directos del estadounidense. En 2024, Kelly Moran es mucho más. Ya con su segundo álbum Ultraviolet en Warp abrió las puertas de su ‘piano preparado’ (piano cuyo sonido se altera colocando distintos objetos entre sus cuerdas) para dejarse influenciar por el jazz, el dream pop, el neoclasicismo e incluso el black metal. Habitual colaboradora de visionarios como FKA twigs, Yves Tumor y The Avalanches, Kelly Moran aterriza en Sónar 2024 para presentar su tercer larga duración, segundo en Warp. La técnica sobrehumana de Moran es el epicentro de este nuevo conjunto de composiciones experimentales y ayuda a expandir aún más los límites creativos y sonoros de su instrumento. Se espera un concierto hipnótico y emocional, en el que la música clásica y la electrónica convergen.