Drew Daniel y M.C. Schmidt tienen la enorme virtud de lograr combinar, sin aparente esfuerzo, estilo, sustancia y concepto a cada nuevo álbum que publican bajo el nombre de Matmos. En su planeta, el pionero de la música concreta Pierre Boulez improvisa con el legendario saxofonista de la Sun Ra Arkestra Marshall Allen, mientras una sirena islandesa parecida a Björk recita pasajes escritos por Burroughs y de fondo resuenan los sonidos de unos crustáceos. El dúo americano obtuvo el reconocimiento internacional con su obra maestra de 2001 "A Chance To Cut Is A Chance To Cure", elaborado con sonidos grabados en un quirófano. Tras ese magnífico trabajo fueron llamados precisamente por Björk, con la que colaboraron en dos álbumes y sus respectivas giras mundiales, sin dejar de sacar al mismo tiempo discos en el sello Matador en los que ensancharon aún más los límites de su ya de por si indefinido sonido. Su manera de trabajar, al mismo tiempo hermética e impredecible, ha dado como último resultado otro excelente álbum, "Ultimate Care II", publicado en Thrill Jockey y compuesto enteramente a partir de sonidos extraídos de una lavadora.

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